El anuncio de la empresa Fagor Electrodomésticos de que entra en suspensión de pagos y de que presenta ante Juzgado preconcurso de acreedores por culpa de sus problemas financieros abre un nuevo panorama para los miles de consumidores afectados por el caso de las «preferentes vascas», la comercialización de manera irregular de participaciones subordinadas de las empresas de titularidad cooperativa Fagor y Eroski. Diversas entidades financieras colocaron en las regiones del norte de España millones de euros en estos híbridos de ahorro-inversión que han atrapado a 40.000 familias en una de las zonas con mayor capacidad de ahorro en España.

«No hay que alarmar», afirma en este sentido el presidente de ADICAE, Manuel Pardos. Recuerda la asociación el caso de Martinsa-Fadesa, promotora inmobiliaria que entró en concurso de acreedores con unas deudas milmillonarias y que atrapó a un importante volumen de consumidores que aportaron sus ahorros para invertirlos en una vivienda promovida por la empresa. «Hubo suspensión de pagos igual», rememora Manuel Pardos, pero al final los afectados, defendidos por ADICAE, vieron restablecidos sus derechos y recuperada su inversión.

«Algo que perfectamente se puede hacer en este caso. Estamos ahora mismo analizando las posibilidades de defensa que tendríamos a partir de ahora!, refiere el presidente de ADICAE, «pero hasta que no se confirme realmente que la empresa ha remitido solicitud de concurso en el juzgado, aún es pronto». Numerosos consumidores vascos han contactado ya con la sede de la asociación en Bilbao para consultar estas líneas de defensa y poder emprender procesos de defensa colectiva: «Mondragón no saldrá de rositas con esta suspensión de pagos», añade Pardos.

 Múltiples marcas 
La corporación Mondragón es un gran tejido de origen cooperativo que engloba a multitud de marcas y empresas, asociadas entre sí, y que configuran un cuerpo jurídico que se está valorando a la hora de emprender las acciones colectivas ahora en marcha. Prueba de ello es el caso de Fagor Industrial, que comparte nombre con la división de Electrodomésticos ahora en preconcurso y que, sin embargo, ha precisado que, «aun estando libremente asociada a la Corporación Mondragón», es una empresa «soberana, independiente de todas ellas», y tiene «un balance saneado y solvente».

Todo ello será analizado en la estrategia de defensa que se ponga en marcha, pues no es de recibo que si el grupo empresarial tiene marcas que atestiguan solvencia y beneficios («rentabilidades positivas incluso en los peores años de la crisis», dice Fagor Industrial) los consumidores tengan que ver perdidos sus ahorros por la mala comercialización de unos productos que no encajaban con su perfil ahorrador.

 La demanda de Eroski, adelante 

El presidente de ADICAE apostilla que este tipo de situaciones no se habrían dado si se hubiese vigilado como es debido la colocación de este tipo de productos complejos. «Vamos a defender a los afectados con uñas y dientes», tanto a los de Fagor como a los atrapados en valores de Eroski, colocados por el BBVA, ahora en juicio cuyas vistas se celebrarán en enero. «Esta demanda debe seguir su curso», dice Manuel Pardos, toda vez que el juez ya ha admitido el carácter colectivo del pleito. «Son productos con un riesgo elevadísimo, aquí están las consecuencias».

Hasta 40.000 familias afectadas, y la comercialización de diferentes productos por valor de 845 millones de euros, es el balance de momento estimado de un nuevo abuso contra los consumidores, un «expolio de ahorros» de los que la mayor parte (más de 600) corresponderían a valores de Eroski y el resto a Fagor. «Si en el caso de Martinsa-Fadesa se pudo conseguir que se rescataran los ahorros de los consumidores, en este caso también se podrá», finaliza Manuel Pardos.