Pese a la bajada de la rentabilidad de los depósitos seguros, la bolsa no es una buena opción para los consumidores. Y harán bien en no invertir en este mercado, porque la mayoría de las empresas españolas que cotizan en él han sufrido descensos de cotización este verano. Apenas 23 compañías del mercado español no han tenido mermas durante la época estival y, de ellas, sólo 10 pertenecen al Ibex 35.
La Bolsa siempre ha sido una opción arriesgada pero con la que se podía obtener buenos beneficios. Sin embargo, en los último meses ha perdido esta rentabilidad, pero sin perder el riesgo.
En total, ha habido unos descensos cercanos al 3%. Además, de las veinte empresas que han obtenido resultados positivos, sólo ocho han logrado unas ganancias superiores al 5%. Para hacernos una idea más global: de las 108 empresas que operan en bolsa española sólo unas 14 han logrado acumular en los meses de verano una subida superior al 1%.
El Banco Central Europeo no descarta bajar aún más los tipos de interés (que ahora justo llega a un 2%) y pretende anunciar medidas con las que la Bolsa recupere su senda positiva. Los analistas, mercados y grandes empresas lo ven con muy buenos ojos y ya se comienza a transmitir de manera triunfal una segura recuperación de muchas entidades.
Pero si miramos con detenimiento los datos no es así. Por ejemplo, se está anunciando a bombo y platillo la sorprendente recuperación del Deutsche Bank, que podría crecer más de un 7%. Y podría ser, pero hay que tener en cuenta que la cotización de esta entidad ha caído un 38% en lo que llevamos de año.
Así que no se deje llevar por los cantos de sirena, ni por las triunfales previsiones, puede haber muchos intereses privados en la evolución de ciertas acciones.
Si decide comprar acciones, hágalo con criterio y responsabilidad, conozca antes sus riesgos, porque podría cosechar importantes pérdidas. Es mejor que primero invierta poco capital. Recuerde que su capital quedará expuesto a la evolución de las acciones de la empresa en la que invierte. Por ejemplo, ante una quiebra, usted se situaría en el último lugar en el concurso de acreedores, con el consiguiente retraso a la hora de recuperar su inversión. La sociedad también puede suspender la remuneración, es decir, que usted como accionista se quede sin cobrar dividendos.
Lo más importante para sacar una rentabilidad a sus ahorros es diseñar uno mismo su propia cartera. Son aconsejables productos como cuentas nómina, depósitos o cuenta de ahorro. Ofrecen menos rentabilidad pero son más seguros y el capital está disponible. Acudir a Bolsa es sólo aconsejable a los ahorradores más expertos en la materia.
Para obtener más información y decidir dónde invertir los ahorros, durante este año 2014, ADICAE pone en marcha diversas campañas informativas en la calle, publicaciones y las aulas de consumo “Mayores activos en derechos” y las “Aulas de presupuesto familiar y prevención de sobreendeudamiento” para concienciar a los consumidores de los peligros que les acechan en sus ahorros así como qué aspectos son claves para una gestión eficaz del presupuesto familiar para evitar los riesgos del sobreendeudamiento.
Si tiene unos ahorros y no sabe qué hacer con ellos, antes de sucumbir a los supuestos encantos de la banca, acuda a las diversas actividades que se desarrollan durante todo el año o acérquese a la sede de ADICAE más cercana y nuestros técnicos revisaran el producto financiero de manera exhaustiva.
