ADICAE, como parte activa del Grupo de Usuarios de Servicios Financieros (FSUG con sus siglas en inglés), ha participado en la Conferencia Internacional celebrada en la Sede del Consejo Económico y Social Europeo en Bruselas sobre los desafíos emergentes en las finanzas minoristas y política de los consumidores. La conferencia giró en torno a cuatro paneles interactivos donde se debatieron temas como los productos financieros para minoristas, la llamada ‘economía del comportamiento’, el crédito hipotecario y las últimas novedades en los medios de pago y sus posibles costes para los consumidores.

El nuevo comisario europeo para la estabilidad financiera, servicios financieros y mercados de capital, Jonathan Hill, fue el encargado de realizar la apertura de esta Conferencia Internacional organizada por el FSUG. “No tenemos un mercado único que funcione para los consumidores, señaló durante su intervención, “la transparencia es el fundamento de la protección del consumidor”. El comisario también quiso destacar las nuevas innovaciones como el crowdfunding, el bitcoin o los nuevos servicios y medios de pago que “pueden traer beneficios para los consumidores, pero también hay que prevenir el riesgo de fraude”. Por último, Hill aseguro que “escuchar a los grupos de usuarios y organizaciones de consumidores es un interés y una prioridad” para garantizar su defensa frente a los abusos de las entidades financieras.

Después de la intervención del comisario europeo, comenzaron los paneles temáticos, en donde se anunciaron nuevos costes para los consumidores en la última ponencia de la conferencia, que abordó las novedades en el ámbito de los medios de pago. Estos nuevos medios de pago se han hecho muy populares en los últimos años y cada vez son empleados por más usuarios, sobre todo en las compras en Internet. Su desarrollo se debe a que los usuarios que operan online buscan variedad, simplicidad y seguridad por encima del coste, como señaló el director general de Paypal en Europa Occidental. Pero la innovación en este campo deja la puerta abierta a nuevos costes para los consumidores, aparejados a la entrada de nuevos intermediarios y al aumento de comisiones, como señalaron los tres responsables del panel sobre medios de pago (el responsable de la División para la Integración de los Mercados del BCE, el director general de Paypal y el presidente del Consejo Europeo de Pagos y subdirector general del Banco Santander): “los medios de pago siempre vienen con un precio. Alguien tiene que pagar su coste”. Es decir, que los consumidores serán los que paguen al final las innovaciones por las que otros se van a lucrar, según señalaron en la conferencia.

Otra de las conferencias abordó la realidad referente a los productos financieros para minoristas. En este sentido, se propuso que las entidades financieras ofrecieran productos más simples y seguros teniendo en cuenta los intereses reales de los consumidores. El moderador del panel, el presidente del FSUG, Mick McAteer, comentó que lo realmente relevante en el consumo de productos financieros no es poder elegir, sino facilitar los productos adecuados a las necesidades y conocimientos de cada persona.

Uno de los temas que contó con un panel propio fue la llamada ‘economía del comportamiento’, es decir, entender cómo los consumidores toman sus decisiones. Esta economía del comportamiento puede proporcionar información pero debe ser dirigida a las empresas y los intermediarios en lugar de los consumidores. Entender la conducta de los consumidores es necesario, pero hay que señalar que el comportamiento de los consumidores siempre está vinculado y muchas veces condicionado por el comportamiento de los proveedores y los intermediarios, por lo que entender su comportamiento es también muy importante para cambiar el comportamiento de las empresas.

El tercer panel trató los temas relacionados con el crédito hipotecario, en donde se incluyó ayudar a los prestatarios en dificultades de pago. El representante del Banco de Irlanda, Bernard Sheridan, propuso introducir restricciones o baremos para préstamos basados en el nivel de ingresos, límites a la venta de préstamos hipotecarios a entidades no reguladas y regulación de las empresas comerciales de gestión de deudas. Además, reconoce convencido, tal y como viene proponiendo ADICAE, que “una legislación sobre la insolvencia personal a nivel europeo es la clave”. A estas medidas, habría que sumar también la posibilidad de que los consumidores puedan acceder a un asesoramiento independiente y barato para obtener créditos hipotecarios más apropiados, como defiende la asociación.

ADICAE seguirá trabajando activamente para que la opinión de los consumidores sea tenida en cuenta también a nivel europeo en las futuras reuniones del Grupo de Usuarios de Servicios Financieros. La asociación, que participó en estas Conferencias como parte activa en las discusiones, seguirá reivindicando productos financieros más simples para una mejor comprensión, asequibilidad y comparabilidad y, sobre todo, la creación de una legislación europea que proteja los derechos de los consumidores en materia financiera.

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