Como viene advirtiendo ADICAE desde hace mucho tiempo, los consumidores estamos pagando la crisis de las entidades financieras a base de comisiones… entre otras cuestiones –prácticas abusivas, productos tóxicos…-. Se trata de un aumento escalonado en el tiempo, que comenzó en 2006 y que desde 2009 ha cobrado velocidad. A pesar de la comprometida situación económica de millones de familias endeudadas en nuestro país, en muchos casos por culpa de malas prácticas bancarias, las entidades financieras siguen sin levantar el pie del acelerador y continúan sangrando a los consumidores por utilizar sus servicios más básicos.
Las principales comisiones han aumentado considerablemente. Y más teniendo en cuenta que, en el último año, el IPC únicamente ha subido un 2’5%, según datos del Instituto Nacional de Estadística. Así, solo durante el mes de noviembre, el incremento en todas las comisiones reflejadas , a excepción de la de mantenimiento que se queda a un 0,4% de alcanzarla también, ya ha sido superior a esta cifra.
Pero, si tomamos los incrementos anuales, veremos que en la mayoría de los casos han sido realmente escandalosos, llegando hasta el 30,7% en el caso de las transferencias y, en el «mejor» de los casos para el consumidor, más que triplicando la subida del IPC.
