El Banco de España, supuesto regulador de las entidades de crédito en nuestro país, está ultimando una pobre, cínica e insuficiente normativa que pretende limitar el sueldo de los directivos de Banca pero sólo lo hace en la superficie, como una tenue capa de maquillaje. Está claro que la circular que el Banco de España ha abierto a consultas afectará a los responsables de las cajas de ahorros, ahora en el ojo del huracán, pero existen dudas de si el Banco de España se decidirá a que afecte también a los directivos de los bancos privados, cuya retribución, hasta ahora, sólo depende de la decisión de la Junta de Accionistas. Sin embargo, el Banco de España cuenta con instrumentos, como la limitación en el reparto de dividendos, que sí afectarían a esa parte variable del sueldo de los banqueros.
De hecho, esos dos términos de resultados “mediocres o negativos” permitirían al Banco de España influir, incluso, en la forma en la que los directivos gestionan los bancos y las cajas. Una gestión que obtiene buena parte de sus resultados exprimiendo a los consumidores, a los que aumentan injustificadamente las comisiones que les cobran y que también se basa en la ejecución de desahucios hipotecarios.
En la circular que prepara el Banco de España, la limitación salarial se centra sólo en la parte variable de los salarios y sólo cuando, a consecuencia de su gestión, los beneficios sean “mediocres o negativos”. Lo que no está previsto, de momento, es que afecte a salarios que ya se han pagado ya que la circular entraría en vigor en enero de 2012.
La retribución total será igual o, incluso, superior a la actual
El sistema de limitación del sueldo que propone el Banco de España aplica una máxima que podría resumirse en: «sólo te limito cuando vaya mal, pero mientras todo vaya bien, gana lo que quieras». Con esos ‘mimbres’ el ‘cesto’ salarial que, previsiblemente, ‘tejan’ los banqueros tendrá una parte variable considerablemente menor que en la actualidad, pero una retribución total igual o, incluso, superior a la actual, con lo que se habrá conseguido un efecto cosmético, pero poco eficaz.
Siguiendo con el alcance de la nueva normativa, la redacción actual de la circular establece que la limitación del sueldo variable o bonus afecte a “la remuneración actual” y también a las “reducciones en los pagos de cantidades previamente devengadas”, pero, de momento, no hace referencia a pagos previstos en el futuro, como las famosas opciones sobre acciones (‘stock options’).
No sabremos, con nombre y apellidos, cuánto cobran los directivos
Por otra parte, tampoco está claro de qué forma y en qué medida afectará la nueva circular a los salarios que cobran los directivos de bancos ya que, como sociedades privadas, en la actualidad la remuneración de sus máximos ejecutivos sólo se somete a la aprobación de las juntas de accionistas y del consejo de administración, dos órganos que están tremendamente controlados y manipulados por los directivos, especialmente en el caso de las juntas de accionistas en donde se ofrecen regalos por ceder el voto. Ese parece ser uno de los motivos por los que la circular del Banco de España no ha sido más ambiciosa, apuntan desde ámbitos del derecho laboral.
Otro punto de la propuesta del Banco de España que es puro maquillaje es el de la transparencia, ya que permite dar la información públicamente cada año, de manera que no se conozca cuánto gana un determinado directivo. La circular establece que se “facilite al público” información “agregada”. Es decir, que no obliga a decir cuánto gana un consejero identificándolo con su nombre y apellidos ya que permite dar esa información con la suma total de lo que ganan todos los consejeros juntos. La norma fija que esa información deberá ser “actualizada periódicamente, al menos una vez al año”. Es cierto que esa información deberá incluir conceptos como el salario, las pensiones y las indemnizaciones por despido que se produzcan en el ejercicio, pero no especifica que se haga detalladamente por cada uno de los directivos y consejeros.