Los diversos cambios fiscales anunciados por el Gobierno de cara al inicio de 2011 afectarán directamente a las deducciones derivadas de las cuentas vivienda que se formalicen desde el 1 de enero.
El Gobierno va a contemplar una base deducible de 9.040 euros para las rentas inferiores a 17.707’20 euros, y ya ha avisado de que, a partir de esta cantidad, las deducciones se irían reduciendo hasta desaparecer para las rentas iguales o superiores a 24.170’20 euros anuales. En cuanto a la adquisición o rehabilitación propiamente dicha de la vivienda habitual, los contribuyentes cuya base imponible sea inferior a 24.107,20 euros anuales podrán deducirse el 7,5 por ciento de las cantidades satisfechas en el período de que se trate. Todo esto se llevará a cabo en cuanto entre en vigor la Ley de Economía Sostenible, lo que no ocurrirá, al menos, hasta los últimos meses de 2010.
El Gobierno pretende así reactivar el mercado inmobiliario. Sin embargo no está claro que estas medidas vayan a tener el efecto deseado. En primer lugar porque el mercado del crédito atraviesa un mal momento a pesar de que las entidades financieras quieran vender lo contrario. Y, en segundo lugar, debido a que la medida va a frenar la caída de los precios ya que, si a partir de 2011 desaparecen las deducciones y por lo tanto sube el precio de la vivienda, muchos propietarios van a mantener los precios conscientes de que conforme se acerque la fecha límite más consumidores estarán interesados en comprar.
Otro problema a tener en cuenta es la existencia de un número bastante elevado de cuentas vivienda en España. Según la Agencia Tributaria, a fecha de 28 de diciembre de 2009, 230.745 personas tenían una, lo que le supone al Estado un coste fiscal de casi 140 millones de euros anuales. Desde el Ejecutivo se ha anunciado que, aproximadamente, el 50% de los asalariados podrán seguir acogiéndose a las deducciones por compra de vivienda pero hay que tener en cuenta al otro 50% que, de pronto, no van a tener deducciones. Pero lo que tendría que decirnos el Gobierno es cómo se compra una vivienda ganando menos de 17.707’20 euros.
Oferta de cuentas vivienda de las entidades
ENTIDAD / INTERÉS ANUAL / OTROS DATOS DE INTERÉS
ING Direct
3’45% durante los cuatro primeros meses y 1’49% desde el quinto mes.
Sin gastos ni comisiones. La cuenta se puede asociar a la que se tenga en otra entidad.
Unicaja
1’75%
Sin coste de mantenimiento ni de administración.
Bancaja
1’75% + 1% nominal sobre el saldo medio anual por cada año de la cuenta vivienda si se formaliza un préstamo hipotecario con Bancaja.
Sin comisiones de mantenimiento, ingresos de cheques, de reclamación de posiciones deudoras y por descubierto.
Banesto
0’50% TAE hasta 9.000 euros; 1% TAE de 9.001 a 18.000 euros; 1’50% TAE desde 18.001 euros.
Sin gastos de administración o mantenimiento.
Openbank
1’25% TAE, con liquidación de intereses mensual.
Sin comisiones administrativas o de mantenimiento. Tarjetas gratuitas y transferencias sin coste alguno.
A tenor de la rentabilidad ofrecida por las entidades financieras, y comparándola con la que ofrecen para los depósitos a plazo fijo, las cuentas vivienda salen claramente perdiendo. En un plazo fijo la rentabilidad mínima habitual suele ser superior al 2%, aunque es cierto que también suele ser usual la contratación de algunos productos vinculados. Sin embargo es difícilmente entendible la diferencia entre estas rentabilidades, dado que en ambos casos se trata de captación de pasivo para las entidades financieras. Esta situación da a entender que, quizá, a los bancos no les interese reactivar el mercado inmobiliario y que prefieran liquidar en primer lugar su propio stock de viviendas.
