Nuevo varapalo judicial a Bankia por la venta indebida de participaciones preferentes y deuda subordinada. Esta vez ha sido condenada por el juzgado de primera instancia 23 de Valencia a devolver un total de 72.000 euros a H.R.P., profesor de enseñanza secundaria de Educación Física de 54 años que, según ha indicado la juez, no tenía conocimientos financieros.
La entidad debía haberle informado adecuadamente sobre las características y los riesgos de las participaciones preferentes y la deuda subordinada y no lo hizo. No consta que se entregara documentación alguna ni se ofreciera información adecuada sobre los productos en ninguna de las tres operaciones de compra que se realizaron. Incluso el único test de conveniencia que se le hizo “fue realizado por la directora de la oficina sin proceder a realizar las preguntas contenidas en el mismo al actor”, indica la magistrada.
Lo que diferencia a H.R.P. de otros afectados es que, con anterioridad, había contratado bonos de Bancaja y fondos. Sin embargo el mero hecho de tener contratados estos productos no significa que un consumidor tenga elevados conocimientos financieros. “Con respecto a los bonos y fondos (…) no hay explicación alguna del producto ni consta tampoco previa información para concluir que en la contratación de dichos productos conociese el significado, funcionamiento y riesgos de los productos suscritos”, explica la juez.
La cifra de usuarios que han recuperado sus ahorros gracias a la acción colectiva deADICAE ya asciende, de esta manera, a 1.689: 727 de Caja Madrid, 425 de Bancaja, 196 de Caixa Catalunya, 96 de Caixa Galicia, 62 de Caixa Laietana, 60 de Caja España – Caja Duero, 48 de Caixa Nova, 34 de Banco Santander, 19 de Caja Rioja, 16 de Caja Segovia, 13 de Caja Canarias, 7 de Cajastur y 6 de Caja Ávila. La media de los ahorros depositados por los afectados ronda los 30.000 euros. Estas cantidades recuperadas, unidas a las sentencias favorables que acumula ADICAE, hacen que la banca tenga que devolver, por ahora, 49.116.017,42 euros.
Estos datos no significan una solución real para todos los afectados, pero demuestran que la presión social colectiva y la acción de mediación realizada seria y profesionalmente, son altamente efectivas. No obstante es preciso seguir luchando para impulsar una solución colectiva a este clamoroso fraude. Nuestra asociación sigue presentando demandas agrupadas, recopilando la documentación de los consumidores que quieran denunciar a su banco por este turbio asunto y realizando asambleas informativas en todo el Estado.