ADICAE señala algunos riesgos para el sobreendeudamiento familiar en plena crisis del Covid-19

By | Ahorros

Las dificultades económicas provocadas por el coronavirus Covid-19 y los abusos recurrentes en los contratos podrían llevar a muchas familias a caer en el sobreendeudamiento si no se atiende a la letra pequeña al solicitar un crédito al consumo, si se abusa de la tarjeta de crédito o pago aplazado o si se solicita una moratoria poco ventajosa.

La necesidad de financiación en momentos de apuros económicos, unida a la gran variedad y naturaleza de productos disponibles, puede llevar a muchos consumidores a solicitar créditos al consumo con intereses abusivos o, lo que agravaría la situación, otro tipo de productos, como pudieran ser los microcréditos de sociedades mercantiles, que escapan de la supervisión del Banco de España. Acceder a toda la información sobre el préstamo y comparar entre distintos productos y entidades ayudarán al consumidor antes de firmar el contrato. ADICAE quiere poner el foco además en el peligro de generalizar el uso de tarjetas de crédito frente a otros métodos de pago, por la crisis sanitaria provocada por el coronavirus Covid-19, recordando una vez más el riesgo de sobreendeudamiento que un mal uso de este tipo de tarjetas puede acarrear. Esta crisis deja además una nueva trampa de la banca, aprovechando el momento, con el ofrecimiento de ‘sus’ moratorias en hipotecas y créditos que pueden suponer un gran sobrecoste final para el consumidor. 

En estos momentos de incertidumbre se abren nuevos peligros para las economías familiares y ADICAE quiere recalcar una vez más la importancia de la formación y la información entre los usuarios y consumidores, que junto a la prevención y precaución, pueden suponer el mejor escudo para protegerse contra posibles abusos en materia financiera, una apuesta que esta asociación materializa en su Plataforma On Line de Educación Financiera y de Consumo.

La excepcionalidad del momento que vivimos lleva a esta asociación a detenerse para hablar del riesgo de sobreendeudamiento al que familias y consumidores se enfrentan en estos días. Por ello, ADICAE alerta a los consumidores de los problemas que pueden acarrear en estos momentos decisiones como acceder a créditos con intereses abusivos o, simplemente, priorizar y dar un mal uso a una tarjeta de crédito o de pago aplazado.

Para más inri, la media de los intereses que se están pagando en España supera con creces a la europea. Así, si en nuestro país la media del TAE en un crédito al consumo ronda el 8%, en Europa se queda en el 6%. Algo parecido pasa con la media de intereses que se están pagando por aplazar los pagos con las tarjetas de crédito y ‘revolving’ en España, alrededor de un desorbitado 20%, frente al 16,5% de la media Europea. ADICAE denuncia pues que los intereses que pagan los consumidores españoles por acceder a determinados créditos se sitúan muy por encima de los de sus homólogos europeos.

 

¿Qué debo revisar al solicitar un crédito al consumo?

Llegados a este punto, el consumidor que quiera acceder a un crédito al consumo debe saber que la entidad bancaria ha de proporcionar una serie de datos con respecto al contrato que le permitirá comparar entre productos y proveedores del crédito antes de tomar una decisión. ADICAE recomienda a los consumidores comparar las principales características de los distintos créditos y las distintas entidades antes de suscribir el contrato con alguna de ellas.

Dentro de estas principales características, que el proveedor del crédito debe facilitar al consumidor en un documento denominado Información normalizada europea sobre el crédito al consumo, el consumidor debe prestar especial atención al importe del crédito y al que será su coste total (intereses, comisiones, impuestos u otros gastos); al TAE, Tasa Anual Equivalente; al númeroperiodicidad e importe de los pagos; y a los aspectos jurídicos más importantes.

Con estos datos en la mano, el consumidor debe ser capaz de comprender cuánto dinero está pidiendo, cuánto y cuándo tendrá que devolver al banco y cómo lo irá haciendo, lo que en la práctica le permitirá elegir entre los distintos productos que esté comparando.

ADICAE insiste pues en la obligatoriedad de la entidad proveedora del crédito de facilitarnos de manera previa y comprensible todos los datos con respecto al mismo, para que el consumidor comprenda el producto que se le está ofreciendo y, con ello, los riesgos que pudiera asumir con la firma del contrato.

Entre estos riesgos, los cuales el consumidor puede conocer en su totalidad gracias al Curso Básico de Créditos al Consumo de la Plataforma On Line ADICAE, se encontraría principalmente el de sobreendeudamiento, recordando por ejemplo que a mayor cantidad solicitada o plazo de amortización, más intereses deberá soportar el usuario o, por otro lado, el coste que podría conllevar la contratación de productos adicionales, que puede encarecer indirectamente el préstamo.

 

Derecho de desistimiento

En cualquier caso, el consumidor debe ser conocedor de que le ampara el derecho de desistimiento, según el cual, podría rescindir el contrato en un plazo de 14 días naturales a partir de la fecha de la firma del mismo. En este caso y en este periodo de tiempo, el consumidor no tiene que justificar su decisión, ni dar explicaciones pero sí devolver el dinero prestado, más los intereses y todas las comisiones no reembolsables que el proveedor del crédito ya haya abonado.

Añadir en todo caso que se trata de un derecho de carácter temporal, imperativo e irrenunciable y ejecutarlo es gratuito, más allá de los intereses y comisiones no reembolsables.

Por último, si el contrato del crédito estuviese vinculado a un servicio accesorio, al ejercer el derecho de desistimiento del préstamo deja también de estar vinculado a ese servicio accesorio.

 

Reembolso anticipado del préstamo

Transcurrido el plazo para ejercer el derecho de desistimiento, el consumidor también podría optar por reembolsar el préstamo antes de los plazos fijados en el contrato, si bien le podría ser aplicada una comisión por vencimiento anticipado, que en ningún caso puede ser mayor que el importe total de intereses que se habrían pagado. Por ende, esta comisión no puede superar el 1% del dinero devuelto anticipadamente, si el tiempo transcurrido entre el reembolso y la terminación del contrato es superior a un año, o un 0,5%, si el tiempo es inferior a un año.

 

Vías de reclamación

Siempre se puede recurrir a asociaciones como ADICAE para obtener información, así como asesoramiento de las posibles vías de reclamación. Para concluir, la normativa vigente en relación a los créditos de consumo Ley 16/2011 contempla la vía extrajudicial a la hora de presentar una reclamación, especificando que el prestamista, el intermediario de crédito y el consumidor podrán someter sus conflictos al arbitraje de consumo, mediante adhesión de aquéllos al Sistema Arbitral del Consumo o a otros sistemas de resolución extrajudicial de conflictos.

No obstante, contra las conductas contrarias a esta Ley podrá ejercitarse la acción de cesación por vía judicial conforme a lo previsto en la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios.

 

Cuidado con las tarjetas de crédito

Más allá de los créditos al consumo, desde los primeros momentos de esta crisis del coronavirus Covid-19, y gracias en buena medida a los nuevos canales de comunicación telemática con sus socios y grupos de trabajo a través de WhatsApp al número 660175964, mediante el correo electrónico consultas@adicae.net o el formulario en su página web https://www.adicae.net/envie-su-consulta.html, ADICAE viene detectando un incremento considerable en el uso de tarjetas de crédito por parte de los consumidores y ante la incertidumbre sobre los posibles contagios que pudiera acarrear el uso de efectivo.

El consumidor no debe olvidar los riesgos que acarrea normalizar y, sobre todo, dar un mal uso a la tarjeta de crédito o de pago aplazado. Aplazar a crédito nuestras compras puede conllevar altos intereses aparejados, que actualmente rondan el 20% de la cantidad aplazada. Un uso descontrolado de los pagos con tarjeta de crédito, hace que no nos demos cuenta del montante de dinero gastado y lleguemos incluso a quedarnos en números rojos en el momento en el que nos pasen el cobro.

ADICAE señala directamente a las denominadas tarjetas ‘revolving’, donde se llegan a pagar intereses desorbitados y fraudulentos, recordando además a todas personas que pudieran haber sido víctimas de estas prácticas que desde esta asociación se fomenta una acción colectiva para reclamar la nulidad del contrato por dos motivos: los intereses usurarios declarados así por sentencias del Tribunal Supremo de 2015 y 2020 y por no superar el criterio de transparencia de los contratos ya que no se informa al consumidor de la carga tan onerosa que supone este tipo de crédito cuando se comercializan.

 

Moratorias ‘trampa’

Por último, ADICAE recuerda, como denunciaba reciente y públicamente, la oportunidad perdida de la banca para reconciliarse con los usuarios, dejando de adoptar medidas sinceras y de contar con las organizaciones representativas de los consumidores y usuarios como esta asociación. La banca ha aprovechado los reales decretos 8/2020 y 11/2020 sobre moratorias hipotecarias para usuarios con determinados parámetros económicos y familiares en el marco de la crisis del coronavirus Covid-19 para acabar ofreciendo sus ‘propias’ moratorias con sus ‘propias’ condiciones.

El anuncio de AEB y CECA de “ofrecer aplazamientos” en el pago de hipotecas y créditos constituye a juicio de ADICAE una “trampa” que, lejos de instrumentar fórmulas razonables y eficaces para los consumidores, encubre no sólo costes muy elevados para los hipotecados y deudores que accedan a estas medidas, sino un grave riesgo de anulación en la práctica de las moratorias legales acordadas por el Consejo de Ministros. Todo ello con una aplicación carente de transparencia alguna.

ADICAE señala algunos riesgos para el sobreendeudamiento familiar en plena crisis del Covid-19

By | Actualidad, Créditos

La necesidad de financiación en momentos de apuros económicos, unida a la gran variedad y naturaleza de productos disponibles, puede llevar a muchos consumidores a solicitar créditos al consumo con intereses abusivos o, lo que agravaría la situación, otro tipo de productos, como pudieran ser los microcréditos de sociedades mercantiles, que escapan de la supervisión del Banco de España. Acceder a toda la información sobre el préstamo y comparar entre distintos productos y entidades ayudarán al consumidor antes de firmar el contrato.

ADICAE quiere poner el foco además en el peligro de generalizar el uso de tarjetas de crédito frente a otros métodos de pago, por la crisis sanitaria provocada por el coronavirus Covid-19, recordando una vez más el riesgo de sobreendeudamiento que un mal uso de este tipo de tarjetas puede acarrear. Esta crisis deja además una nueva trampa de la banca, aprovechando el momento, con el ofrecimiento de ‘sus’ moratorias en hipotecas y créditos que pueden suponer un gran sobrecoste final para el consumidor.

En estos momentos de incertidumbre se abren nuevos peligros para las economías familiares y ADICAE quiere recalcar una vez más la importancia de la formación y la información entre los usuarios y consumidores, que junto a la prevención y precaución, pueden suponer el mejor escudo para protegerse contra posibles abusos en materia financiera, una apuesta que esta asociación materializa en su Plataforma On Line de Educación Financiera y de Consumo.

La excepcionalidad del momento que vivimos lleva a esta asociación a detenerse para hablar del riesgo de sobreendeudamiento al que familias y consumidores se enfrentan en estos días. Por ello, ADICAE alerta a los consumidores de los problemas que pueden acarrear en estos momentos decisiones como acceder a créditos con intereses abusivos o, simplemente, priorizar y dar un mal uso a una tarjeta de crédito o de pago aplazado.

Para más inri, la media de los intereses que se están pagando en España supera con creces a la europea. Así, si en nuestro país la media del TAE en un crédito al consumo ronda el 8%, en Europa se queda en el 6%. Algo parecido pasa con la media de intereses que se están pagando por aplazar los pagos con las tarjetas de crédito y ‘revolving’ en España, alrededor de un desorbitado 20%, frente al 16,5% de la media Europea. ADICAE denuncia pues que los intereses que pagan los consumidores españoles por acceder a determinados créditos se sitúan muy por encima de los de sus homólogos europeos.

¿Qué debo revisar al solicitar un crédito al consumo?
Llegados a este punto, el consumidor que quiera acceder a un crédito al consumo debe saber que la entidad bancaria ha de proporcionar una serie de datos con respecto al contrato que le permitirá comparar entre productos y proveedores del crédito antes de tomar una decisión. ADICAE recomienda a los consumidores comparar las principales características de los distintos créditos y las distintas entidades antes de suscribir el contrato con alguna de ellas.

Dentro de estas principales características, que el proveedor del crédito debe facilitar al consumidor en un documento denominado Información normalizada europea sobre el crédito al consumo, el consumidor debe prestar especial atención al importe del crédito y al que será su coste total (intereses, comisiones, impuestos u otros gastos); al TAE, Tasa Anual Equivalente; al número, periodicidad e importe de los pagos; y a los aspectos jurídicos más importantes.

Con estos datos en la mano, el consumidor debe ser capaz de comprender cuánto dinero está pidiendo, cuánto y cuándo tendrá que devolver al banco y cómo lo irá haciendo, lo que en la práctica le permitirá elegir entre los distintos productos que esté comparando.

ADICAE insiste pues en la obligatoriedad de la entidad proveedora del crédito de facilitarnos de manera previa y comprensible todos los datos con respecto al mismo, para que el consumidor comprenda el producto que se le está ofreciendo y, con ello, los riesgos que pudiera asumir con la firma del contrato.
Entre estos riesgos, los cuales el consumidor puede conocer en su totalidad gracias al Curso Básico de Créditos al Consumo de la Plataforma On Line ADICAE, se encontraría principalmente el de sobreendeudamiento, recordando por ejemplo que a mayor cantidad solicitada o plazo de amortización, más intereses deberá soportar el usuario o, por otro lado, el coste que podría conllevar la contratación de productos adicionales, que puede encarecer indirectamente el préstamo.

Derecho de desistimiento
En cualquier caso, el consumidor debe ser conocedor de que le ampara el derecho de desistimiento, según el cual, podría rescindir el contrato en un plazo de 14 días naturales a partir de la fecha de la firma del mismo. En este caso y en este periodo de tiempo, el consumidor no tiene que justificar su decisión, ni dar explicaciones pero sí devolver el dinero prestado, más los intereses y todas las comisiones no reembolsables que el proveedor del crédito ya haya abonado.

Añadir en todo caso que se trata de un derecho de carácter temporal, imperativo e irrenunciable y ejecutarlo es gratuito, más allá de los intereses y comisiones no reembolsables.
Por último, si el contrato del crédito estuviese vinculado a un servicio accesorio, al ejercer el derecho de desistimiento del préstamo deja también de estar vinculado a ese servicio accesorio.

Reembolso anticipado del préstamo
Transcurrido el plazo para ejercer el derecho de desistimiento, el consumidor también podría optar por reembolsar el préstamo antes de los plazos fijados en el contrato, si bien le podría ser aplicada una comisión por vencimiento anticipado, que en ningún caso puede ser mayor que el importe total de intereses que se habrían pagado. Por ende, esta comisión no puede superar el 1% del dinero devuelto anticipadamente, si el tiempo transcurrido entre el reembolso y la terminación del contrato es superior a un año, o un 0,5%, si el tiempo es inferior a un año.

Vías de reclamación
Siempre se puede recurrir a asociaciones como ADICAE para obtener información, así como asesoramiento de las posibles vías de reclamación. Para concluir, la normativa vigente en relación a los créditos de consumo Ley 16/2011 contempla la vía extrajudicial a la hora de presentar una reclamación, especificando que el prestamista, el intermediario de crédito y el consumidor podrán someter sus conflictos al arbitraje de consumo, mediante adhesión de aquéllos al Sistema Arbitral del Consumo o a otros sistemas de resolución extrajudicial de conflictos.

No obstante, contra las conductas contrarias a esta Ley podrá ejercitarse la acción de cesación por vía judicial conforme a lo previsto en la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios.

Cuidado con las tarjetas de crédito
Más allá de los créditos al consumo, desde los primeros momentos de esta crisis del coronavirus Covid-19, y gracias en buena medida a los nuevos canales de comunicación telemática con sus socios y grupos de trabajo a través de WhatsApp al número 660175964, mediante el correo electrónico consultas@adicae.net o el formulario en su página web https://www.adicae.net/envie-su-consulta.html, ADICAE viene detectando un incremento considerable en el uso de tarjetas de crédito por parte de los consumidores y ante la incertidumbre sobre los posibles contagios que pudiera acarrear el uso de efectivo.

El consumidor no debe olvidar los riesgos que acarrea normalizar y, sobre todo, dar un mal uso a la tarjeta de crédito o de pago aplazado. Aplazar a crédito nuestras compras puede conllevar altos intereses aparejados, que actualmente rondan el 20% de la cantidad aplazada. Un uso descontrolado de los pagos con tarjeta de crédito, hace que no nos demos cuenta del montante de dinero gastado y lleguemos incluso a quedarnos en números rojos en el momento en el que nos pasen el cobro.

ADICAE señala directamente a las denominadas tarjetas ‘revolving’, donde se llegan a pagar intereses desorbitados y fraudulentos, recordando además a todas personas que pudieran haber sido víctimas de estas prácticas que desde esta asociación se fomenta una acción colectiva para reclamar la nulidad del contrato por dos motivos: los intereses usurarios declarados así por sentencias del Tribunal Supremo de 2015 y 2020 y por no superar el criterio de transparencia de los contratos ya que no se informa al consumidor de la carga tan onerosa que supone este tipo de crédito cuando se comercializan.

Moratorias ‘trampa’
Por último, ADICAE recuerda, como denunciaba reciente y públicamente, la oportunidad perdida de la banca para reconciliarse con los usuarios, dejando de adoptar medidas sinceras y de contar con las organizaciones representativas de los consumidores y usuarios como esta asociación. La banca ha aprovechado los reales decretos 8/2020 y 11/2020 sobre moratorias hipotecarias para usuarios con determinados parámetros económicos y familiares en el marco de la crisis del coronavirus Covid-19 para acabar ofreciendo sus ‘propias’ moratorias con sus ‘propias’ condiciones.

El anuncio de AEB y CECA de “ofrecer aplazamientos” en el pago de hipotecas y créditos constituye a juicio de ADICAE una “trampa” que, lejos de instrumentar fórmulas razonables y eficaces para los consumidores, encubre no sólo costes muy elevados para los hipotecados y deudores que accedan a estas medidas, sino un grave riesgo de anulación en la práctica de las moratorias legales acordadas por el Consejo de Ministros. Todo ello con una aplicación carente de transparencia alguna.

ADICAE recuerda a los consumidores cómo enfrentarse a la escalada de precios de la cesta de compra básica

By | Actualidad, Consumo

El aumento de los precios de los productos de la cesta básica por la crisis sanitaria ha repercutido directamente sobre el bolsillo de los consumidores. La tasa anual de los alimentos ha pasado del 2,5% al 4% en el pasado mes de abril y algunos de ellos, como legumbres y hortalizas frescas, incrementaron sus precios por encima del 10%. ADICAE denuncia estos abusos en momentos tan complicados para el consumidor y recuerda algunos consejos básicos con los que conseguir paliar estas subidas.

Tal y como venía detectando y denunciando ADICAE, fruto de las nuevas vías de comunicación habilitadas a través del canal de WhatsApp al número 660175964 o mediante el correo electrónico consultas@adicae.net o el formulario en su página web https://www.adicae.net/envie-su-consulta.html, el Instituto Nacional de Estadística lo ha confirmado: los precios de los alimentos de la cesta básica de la compra se han incrementado por encima de lo habitual durante los meses que dura el decreto del Estado de Alarma por la crisis del coronavirus Covid-19. En concreto, y según el último informe sobre el Índice de los Precios de Consumo (IPC), destaca el comportamiento de los precios de los alimentos, cuya tasa anual pasa del 2,5% en marzo al 4,0% en abril. De ellos, los alimentos frescos alcanzan una tasa del 6,9%, tres puntos por encima de la del mes anterior, y los alimentos envasados aumentan su tasa anual seis décimas, hasta el 2,2%.

ADICAE quiere denunciar estos abusos en los precios de productos básicos, entendiendo que la excepcionalidad del momento no debe ser repercutida directamente sobre el bolsillo del consumidor, menos aún cuando hablamos de productos de primera necesidad y de temporada, como pudieran ser legumbres y hortalizas frescas, cuyos precios se incrementaron hasta en un 10,4 por ciento en un solo mes.

Otro efecto negativo para el consumidor viene derivado del propio confinamiento y del consejo de las autoridades sobre limitar el número de visitas a mercados y supermercados para la adquisición de alimentos, que en la práctica se traducía en realizar una compra grande en vez de varias pequeñas para disminuir los riesgos sanitarios tanto del propio consumidor como de los empleados de estos establecimientos. Ante algunos problemas puntuales de abastecimiento o de reposición del stock, el consumidor ha visto mermada su posibilidad de comparar productos, lo que en ocasiones se ha traducido en la adquisición de productos más caros al no estar en ese momento disponibles otros más baratos y el consiguiente encarecimiento de su carro de la compra.

ADICAE quiere remarcar que este encarecimiento en el carro de la compra es especialmente lesivo en este momento en el que la inmensa mayoría de las familias se ha confinado al completo en el hogar, aumentando los consumos diarios (los niños ya no van al comedor o los progenitores no han comido en el trabajo) y por ende la demanda de estos productos básicos.

Mención aparte merecen los productos de limpieza para el hogar, tan necesarios en estos días y cuya demanda ha aumentado considerablemente con el confinamiento y ante la crisis sanitaria. El propio INE recalca que “entre los productos no alimentarios más consumidos durante el confinamiento destacan por su aumento de precios en el mes de abril los productos de limpieza del hogar, con una tasa mensual del 1,2%, y los otros artículos no duraderos para el hogar, con una subida del 1,0%”.
Por último, señalar que este aumento de precios se ha visto trasladado también a los comercios electrónicos, por lo que el consumidor tampoco ha visto una vía de escape a esos determinados abusos a través de sus compras digitales.

Así, si hace unos meses asistíamos a las movilizaciones de agricultores y ganaderos por el desproporcionado diferencial entre el precio de los productos en origen y en destino, en el campo y en la mesa, la actual crisis no ha supuesto sólo un incremento en algunos productos en los supermercados, sino que también ha afectado directamente a las cotizaciones en origen. En este sentido ADICAE quiere recordar que los alimentos que llegan a nuestros supermercados están controlados, en buena medida, por apenas un reducido número de empresas, relacionadas con el sector financiero. Por ello, ADICAE está en contacto con varias de las organizaciones que representan a agricultores y ganaderos, a fin de impulsar no sólo cambios y medidas que corrijan una situación indeseable, sino que los costes de dichos cambios y medidas no recaigan, como suele ser habitual, en los consumidores.

Consejos para ahorrar en la cesta de la compra
ADICAE, como en tantas ocasiones, quiere salir al paso de esta realidad y recordar a los consumidores que hay algunas pequeñas prácticas de sencillo cumplimiento que les ayudarán para rebajar su ticket final a la hora de pasar por caja. El consumidor que llegue a convertir en hábitos algunos de estos consejos, no sólo conseguirá limitar el gasto puntualmente sino que conseguirá un importante ahorro a medio y largo plazo.

• Realizar una lista de la compra y cíñase a la misma. Planifique previamente su compra antes de ir a la misma según sus necesidades y teniendo en cuenta cuándo será la próxima vez que vaya a ir. Así evitará comprar de más y tener que acabar tirando alimentos que pudieran acabar poniéndose en mal estado. Recuerde que nuestro objetivo es ahorrar. Por ello es conveniente ceñirse a lo que necesitamos y hemos plasmado en la lista de la compra. Si queremos ahorrar, no es el momento de caprichos que llegan a encarecer notablemente nuestro carro.
• Si es posible, coja una cesta en vez de un carro. Con el carro, el consumidor tiende a llenarlo e incrementará el número de productos y el ticket final.
• Compare precios. Imprescindible si se quiere ahorrar. Si en estos momentos de crisis no se quiere perder tiempo en el establecimiento, se puede realizar una labor previa en la página web del supermercado al que vayamos a acudir.
• Compare establecimientos. Hay grandes diferencias entre cadenas. Al igual que en el caso anterior, en estos momentos de crisis sanitaria se puede realizar esa labor previamente desde las páginas web.
• Consuma productos frescos y de temporada. Por lo habitual, su precio será el óptimo en ese momento.
• Consuma productos a granel frente a envasados. Así adquirirá exactamente lo que necesita y evitará llevarse productos de más. Además, es fácil que en algunos productos envasados pueda encontrarse con piezas en peor estado y las acabe tirando.
• Consuma marca blancas, pero de productos que realmente necesite. El precio de algunos productos de marca blanca nos puede llevar a comprar de manera compulsiva aunque no se trate de un bien que ese momento necesitemos. Conozca las marcas blancas de calidad y de su gusto e incorpórelas a su lista de la compra.
• Localice y compruebe las ofertas. Las ofertas pueden suponer un importante ahorro si compramos con cabeza. Compre esas ofertas cuando realmente sean necesarias. Compruebe además que con reclamos como formatos familiares o del tipo 2×1 estamos consiguiendo un ahorro. Muchas veces no es así.
• Revise y conserve su ticket de compra. Compruebe siempre su ticket de compra, tanto para revisar que no se han repetido productos como para comprobar que se han aplicado los precios y ofertas publicados. Conserve además el ticket como justificante de la compra, le será necesario si necesita hacer algún cambio o reclamación
• Utilice tarjetas y bonos descuentos. Con una correcta utilización de los mismos, en productos que se necesiten, se conseguirá un importante ahorro.

ADICAE recuerda a los consumidores cómo enfrentarse a la escalada de precios de la cesta de compra básica

By | Ahorros

La cesta de la compra básica se dispara con motivo de la crisis provocada por el coronavirus, con subidas de precios superiores al 10% en un solo mes en algunos alimentos.

El aumento de los precios de los productos de la cesta básica por la crisis sanitaria ha repercutido directamente sobre el bolsillo de los consumidores. La tasa anual de los alimentos ha pasado del 2,5% al 4% en el pasado mes de abril y algunos de ellos, como legumbres y hortalizas frescas, incrementaron sus precios por encima del 10%. ADICAE denuncia estos abusos en momentos tan complicados para el consumidor y recuerda algunos consejos básicos con los que conseguir paliar estas subidas. 

Tal y como venía detectando y denunciando ADICAE, fruto de las nuevas vías de comunicación habilitadas a través del canal de WhatsApp al número 660175964 o mediante el correo electrónico consultas@adicae.net o el formulario en su página web https://www.adicae.net/envie-su-consulta.html, el Instituto Nacional de Estadística lo ha confirmado: los precios de los alimentos de la cesta básica de la compra se han incrementado por encima de lo habitual durante los meses que dura el decreto del Estado de Alarma por la crisis del coronavirus Covid-19. En concreto, y según el último informe sobre el Índice de los Precios de Consumo (IPC), destaca el comportamiento de los precios de los alimentos, cuya tasa anual pasa del 2,5% en marzo al 4,0% en abril. De ellos, los alimentos frescos alcanzan una tasa del 6,9%, tres puntos por encima de la del mes anterior, y los alimentos envasados aumentan su tasa anual seis décimas, hasta el 2,2%.

ADICAE quiere denunciar estos abusos en los precios de productos básicos, entendiendo que la excepcionalidad del momento no debe ser repercutida directamente sobre el bolsillo del consumidor, menos aún cuando hablamos de productos de primera necesidad y de temporada, como pudieran ser legumbres y hortalizas frescas, cuyos precios se incrementaron hasta en un 10,4 por ciento en un solo mes.

Otro efecto negativo para el consumidor viene derivado del propio confinamiento y del consejo de las autoridades sobre limitar el número de visitas a mercados y supermercados para la adquisición de alimentos, que en la práctica se traducía en realizar una compra grande en vez de varias pequeñas para disminuir los riesgos sanitarios tanto del propio consumidor como de los empleados de estos establecimientos. Ante algunos problemas puntuales de abastecimiento o de reposición del stock, el consumidor ha visto mermada su posibilidad de comparar productos, lo que en ocasiones se ha traducido en la adquisición de productos más caros al no estar en ese momento disponibles otros más baratos y el consiguiente encarecimiento de su carro de la compra.

ADICAE quiere remarcar que este encarecimiento en el carro de la compra es especialmente lesivo en este momento en el que la inmensa mayoría de las familias se ha confinado al completo en el hogar, aumentando los consumos diarios (los niños ya no van al comedor o los progenitores no han comido en el trabajo) y por ende la demanda de estos productos básicos.

Mención aparte merecen los productos de limpieza para el hogar, tan necesarios en estos días y cuya demanda ha aumentado considerablemente con el confinamiento y ante la crisis sanitaria. El propio INE recalca que “entre los productos no alimentarios más consumidos durante el confinamiento destacan por su aumento de precios en el mes de abril los productos de limpieza del hogar, con una tasa mensual del 1,2%, y los otros artículos no duraderos para el hogar, con una subida del 1,0%”.

Por último, señalar que este aumento de precios se ha visto trasladado también a los comercios electrónicos, por lo que el consumidor tampoco ha visto una vía de escape a esos determinados abusos a través de sus compras digitales.

Así, si hace unos meses asistíamos a las movilizaciones de agricultores y ganaderos por el desproporcionado diferencial entre el precio de los productos en origen y en destino, en el campo y en la mesa, la actual crisis no ha supuesto sólo un incremento en algunos productos en los supermercados, sino que también ha afectado directamente a las cotizaciones en origen. En este sentido ADICAE quiere recordar que los alimentos que llegan a nuestros supermercados están controlados, en buena medida, por apenas un reducido número de empresasrelacionadas con el sector financiero. Por ello, ADICAE está en contacto con varias de las organizaciones que representan a agricultores y ganaderos, a fin de impulsar no sólo cambios y medidas que corrijan una situación indeseable, sino que los costes de dichos cambios y medidas no recaigan, como suele ser habitual, en los consumidores.

Consejos para ahorrar en la cesta de la compra

ADICAEcomo en tantas ocasiones, quiere salir al paso de esta realidad y recordar a los consumidores que hay algunas pequeñas prácticas de sencillo cumplimiento que les ayudarán para rebajar su ticket final a la hora de pasar por caja. El consumidor que llegue a convertir en hábitos algunos de estos consejos, no sólo conseguirá limitar el gasto puntualmente sino que conseguirá un importante ahorro a medio y largo plazo.

Realizar una lista de la compra y cíñase a la misma. Planifique previamente su compra antes de ir a la misma según sus necesidades y teniendo en cuenta cuándo será la próxima vez que vaya a ir. Así evitará comprar de más y tener que acabar tirando alimentos que pudieran acabar poniéndose en mal estado. Recuerde que nuestro objetivo es ahorrar. Por ello es conveniente ceñirse a lo que necesitamos y hemos plasmado en la lista de la compra. Si queremos ahorrar, no es el momento de caprichos que llegan a encarecer notablemente nuestro carro.

Si es posible, coja una cesta en vez de un carro. Con el carro, el consumidor tiende a llenarlo e incrementará el número de productos y el ticket final.

Compare precios. Imprescindible si se quiere ahorrar. Si en estos momentos de crisis no se quiere perder tiempo en el establecimiento, se puede realizar una labor previa en la página web del supermercado al que vayamos a acudir.

Compare establecimientos. Hay grandes diferencias entre cadenas. Al igual que en el caso anterior, en estos momentos de crisis sanitaria se puede realizar esa labor previamente desde las páginas web.

Consuma productos frescos y de temporada. Por lo habitual, su precio será el óptimo en ese momento.

Consuma productos a granel frente a envasados. Así adquirirá exactamente lo que necesita y evitará llevarse productos de más. Además, es fácil que en algunos productos envasados pueda encontrarse con piezas en peor estado y las acabe tirando.

Consuma marca blancas, pero de productos que realmente necesite. El precio de algunos productos de marca blanca nos puede llevar a comprar de manera compulsiva aunque no se trate de un bien que ese momento necesitemos. Conozca las marcas blancas de calidad y de su gusto e incorpórelas a su lista de la compra.

Localice y compruebe las ofertas. Las ofertas pueden suponer un importante ahorro si compramos con cabeza. Compre esas ofertas cuando realmente sean necesarias. Compruebe además que con reclamos como formatos familiares o del tipo 2×1 estamos consiguiendo un ahorro. Muchas veces no es así.

Revise y conserve su ticket de compra. Compruebe siempre su ticket de compra, tanto para revisar que no se han repetido productos como para comprobar que se han aplicado los precios y ofertas publicados. Conserve además el ticket como justificante de la compra, le será necesario si necesita hacer algún cambio o reclamación

Utilice tarjetas y bonos descuentos. Con una correcta utilización de los mismos, en productos que se necesiten, se conseguirá un importante ahorro.

ADICAE alerta a los consumidores para que no caigan en la trampa de las aerolíneas con la aceptación de los bonos

By | Actualidad, Consumo

La cancelación de miles de vuelos y viajes programados tras decretarse el Estado de Alarma por la crisis sanitaria provocada por la propagación del coronavirus Covid-19 ha afectado a millones de pasajeros, que se preguntan qué derechos tienen ante sus vuelos o viajes cancelados. La excepcionalidad de la situación no deja desamparados a los consumidores, que tendrán derecho al reembolso, tanto en el caso de que el vuelo sea cancelado por la compañía como si es él quien solicita la resolución del contrato. Las aerolíneas y agencias pueden ofrecer, nunca imponer, un bono (voucher) para disfrutar del vuelo o viaje en otro momento.

Desde ADICAE se recomienda reclamar formalmente ante la propia compañía si no son atendidos nuestros derechos y acudir a la autoridad competente, la Agencia Española de Seguridad Áerea en el caso de los vuelos, si persiste el incumplimiento. El consumidor no debe caer en la trampa que están planteando algunas compañías al intentar imponer el bono o voucher y debe reclamar el reembolso de su billete si esa es su preferencia. La vía judicial agotaría las posibilidades de reclamación.

La crisis provocada por el coronavirus Covid-19 ha afectado de manera significativa al transporte de viajeros pero no tanto a los derechos de éstos ante la cancelación de sus viajes. Ante la excepcionalidad de la situación, la propia Comisión Europea interpretaba el Reglamento 261/2004, concluyendo que ante la cancelación de un vuelo, el consumidor tendrá derecho a reembolso o a transporte alternativo, bien sea inmediato o en otra fecha que convenga al pasajero. En este caso, y al tratarse de circunstancias extraordinarias, el consumidor no recibiría compensación ninguna tras la cancelación de su viaje.

En la práctica, esta reinterpretación supone que el consumidor tenga derecho al reembolso inmediato de la cantidad previamente resuelta, en un plazo máximo de 7 días desde que se solicita. Para ello, deberá comunicarlo previamente a la propia compañía. No es necesario presentar la reclamación a ésta en el mismo momento de la cancelación, pues la vigencia de los contratos en España es de 5 años, por lo que ese es el plazo que hay para reclamar. Si la compañía no atendiese a la reclamación, ésta debería ser presentada ante AESA, la Agencia Estatal de Seguridad Aérea. ADICAE recuerda a los consumidores cómo presentar una reclamación ante AESA.

Bonos, la alternativa al reembolso
Ahora bien, en conformidad con el texto normativo y la situación actual, la compañía también puede ofrecer un transporte alternativo lo antes posible (muchas veces inviable en la excepcionalidad que provoca la crisis sanitaria) o para otro momento, donde entran en juego los famosos bonos (vouchers) que algunas compañías quieren imponer. Desde ADICAE insistimos en que el consumidor puede optar por solicitar el reembolso si no acepta la solución del bono. Esta solución solo sería válida si al pasajero también se le ha ofrecido la posibilidad de reembolso. El consumidor no debe caer pues en la trampa que algunas aerolíneas están presentando, al tratar de imponer el bono y debe reclamar el reembolso del billete si esta es su preferencia.

En este caso, el procedimiento para reclamar sería el mismo: reclamación ante la compañía y, si no es atendido, ante AESA, quedando una última vía para la resolución del conflicto, la judicial.

Solicitud de cancelación por parte del pasajero
En el caso de que sea el pasajero el que solicite la anulación del vuelo, se dan dos escenarios posibles, dependiendo de si el vuelo estaba previsto en fecha en el que esté vigente el Estado de Alarma o en fecha posterior.

En el primero de los casos, el consumidor y usuario tendrá derecho a resolver el contrato durante un plazo de 14 días desde la imposible ejecución del mismo. Ante esto la compañía, que no podrá penalizar al pasajero, está facultada para ofrecer bonos o vales sustitutorios al reembolso durante los 60 días posteriores a la solicitud de resolución contractual por parte del consumidor o usuario. Si en ese plazo no se ha llegado a un acuerdo, el empresario estará obligado a devolver las sumas abonadas por el consumidor o usuario, salvo gastos incurridos debidamente desglosados y facilitados al consumidor, en la misma forma en que se realizó el pago en un plazo máximo de 14 días.

En el caso en que la celebración del vuelo a cancelar fuese posterior a la vigencia del Estado de Alarma, la compañía no estaría obligada a cumplir con el citado requisito, por lo que habría que acudir al contrato para conocer la política de cancelación e intentar contactar con la aerolínea para llegar a un acuerdo respecto a la misma.

Viajes combinados
Más allá de los vuelos cancelados, ¿qué puedo hacer si me han cancelado un viaje combinado con motivo del coronavirus Covid-19? El Real Decreto-ley 11/2020, de 31 de marzo, también recogía este supuesto, especificando que “el organizador o, en su caso el minorista, podrán entregar al consumidor o usuario un bono para ser utilizado dentro de un año desde la finalización de la vigencia del Estado de Alarma y sus prórrogas, por una cuantía igual al reembolso que hubiera correspondido. Transcurrido el periodo de validez del bono sin haber sido utilizado, el consumidor podrá solicitar el reembolso completo de cualquier pago realizado”.

No obstante, el mismo texto recoge que “el organizador, o en su caso el minorista, deberán proceder a efectuar el reembolso a los consumidores y usuarios en el supuesto de que estos solicitaran la resolución del contrato, de conformidad con lo previsto en el apartado 2 del artículo 160 del texto refundido de la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios y otras leyes complementarias”. La empresa debe proceder a efectuar el reembolso, cuya cuantía dependerá a su vez de la cuantía devuelta por cada uno de los proveedores incluidos en el viaje combinado al organizador, “en un plazo no superior a 60 días desde la fecha de la resolución del contrato o desde aquella en que los proveedores de servicios hubieran procedido a su devolución”.

ADICAE recomienda a los consumidores que así lo prefieran solicitar la resolución del contrato y con ella el reembolso que le corresponda en vez de aceptar el bono y en el caso de optar por éste, tener en cuenta que la normativa especifica que “deberá contar con el suficiente respaldo financiero que garantice su ejecución”.
No obstante, ADICAE recuerda cuáles son los derechos y vías de reclamación en viajes combinados que protegen a los consumidores.

Viajes en tren
El transporte ferroviario de pasajeros, los viajes en tren, también se ha visto afectado por la crisis provocada por el coronavirus, procediendo Renfe a la anulación de todos los billetes comprados antes del día 16 de marzo y que eran para viajes durante el Estado de Alarma. Todos los afectados recibirán el reembolso total pero sin indemnización, debido a la excepcionalidad del momento.
En cuanto a los billetes que se adquirieron con posterioridad a la declaración del Estado de Alarma y para viajar dentro de la vigencia del mismo, el pasajero de trenes Ave, Larga Distancia, Avant y Media Distancia podrá pedir el cambio sin pagar más y en cualquier tarifa o, directamente, anular el billete sin gastos.

Hay que señalar que se retrasó la puesta en marcha de los trenes Avlo que iba a empezar el 6 de abril, procediendo Renfe al reembolso de los billetes y al envío de códigos promocionales a aquellas personas que adquirieses viajes con la tarifa promocional de 5 euros, para ser utilizados una vez comience a realizarse el servicio.

Viajes en autobús
Algo similar sucede con los viajes en autobús que se han visto afectados por la declaración del Estado de Alarma, teniendo derecho el consumidor al reembolso de la cantidad resuelta, sin indemnización, en caso de cancelación del mismo.

No obstante, las compañías también están ofreciendo bonos (vouchers) para viajar con posterioridad pero ADICAE recuerda a los consumidores que pueden socilitar el reembolso si así lo consideran.

ADICAE, más cerca que nunca
Por último, ADICAE, en su labor de defensa de los consumidores, cuyos derechos se deben mantener incluso en situaciones de crisis como la actual, ha reforzado sus sistemas de atención a distancia y online a los consumidores, a fin de evitar los desplazamientos de los mismos para realizar sus consultas sobre los conflictos que se les planteen. En este sentido, ADICAE intensifica su actividad online de información (a través del canal de WhatsApp al número 660175964 o mediante el email: consultas@adicae.net y el formulario: https://www.adicae.net/envie-su-consulta.html).

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