El cambio climático, un problema grave para 9 de cada 10 consumidores

By | Actualidad, Actualidad., Banca, Consumo, Portada

El presidente de ADICAE, Manuel Pardos, ha inaugurado la Jornada ‘La Economía Circular y los consumidores’ poniendo el foco en el reto en el que nos encontramos como sociedad ante un nuevo modelo de consumo. «En ADICAE nos consideramos consumidores verdes, digitales y sociales» ha reconocido, a la vez que insitía en el importancia de avanzar hacia un cambio en el modelo de consumo en el que la sostenibilidad y la preocupación por el mundo del mañana sustituyan al consumo desaforado y abusivo.

No es una preocupación aislada. Durante los dos próximos años, la Comisión Europea va a proponer un paquete de medidas y normativas que caminen hacia la sostenibilidad en la producción y la transparencia en el consumo, con el objetivo de fomentar un Pacto Verde Europeo que cuente con los consumidores. El anuncio, hecho en la propia jornada, implica un esfuerzo de transición económica y capacidad legislativa de grandes proporciones, y que responde a un hecho incontrovertible: La gran mayoría de los consumidores trasladan su inquietud por el futuro de nuestro medio ambiente, y quieren tomar medidas y ser partícipes de las mismas.

Sin embargo, la lentitud en el cambio de sistemas productivos, el propio lavado de imagen verde de las empresas, y el esfuerzo económico que supone para los ciudadanos ralentizan el proceso. Y la financiación y la inversión en sostenibilidad aumentan, pero a ritmo aún insuficiente. Apenas el 17% del patrimonio de los fondos de inversión en España se considera sostenible, y las variables de rentabilidad y seguridad todavía pesan ante un modelo de inversión que precisa tiempo para generar retorno, como también han explicado Inverco y la CNMV en el encuentro celebrado por ADICAE en el Círculo de Bellas Artes.

Manuel Pardos ha querido recordar el papel de liderazgo de la asociación, no solo en materia de defensa de los usuarios financieros, sino «participando en todos los temas de consumo», principalmente a través de herramientas como la acción colectiva. Un claro ejemplo es la campaña de formación y movilización que ADICAE ha impulsado sobre el tema eléctrico. Una serie de acciones reivindicdativas que, ha recordado el presidente de ADICAE, no ha terminado: «seguiremos saliendo a la calle hasta comprobar que se cumple la promesa del Gobierno de que el recibo de luz de los consumidores vuelva a niveles de 2018».

Además, el presidente de ADICAE ha señalado que esta nueva economía que deberá sustituir el modelo actual debe fundamentarse en la sosteniblidad, el cambio de la concepción de consumo, en la digitalización y una política social fundamentada en la igualdad entre ciudadanos. Sobre estas ideas, las diversas mesas relacionadas con banca e inversión, alimentación y obsolescencia programada han desgranado diversos aspectos sobre estos sectores fundamentales. En todos ellos una idea común, la necesidad de un esquema normativo preciso y comprometido con la sostenibilidad, el consumo responsable y la seguridad y los derechos de los consumidores.

Los datos del IPC adelantado recién publicados por el INE muestran tendencias preocupantes, con incrementos muy elevados ya no solo en energía y electricidad, sino trasladados ya a la alimentación entre otros sectores. La tasa de ahorro de los consumidores españoles, por debajo del 10%, es de las más bajas de entre los países de la Unión Europea, y los presupuestos familiares siguen teniendo problemas no sólo para destinar algo a ahorro, sino incluso para poder atender a los principales gastos y los servicios más básicos a los consumidores.

55.000 millones de euros en fondos «verdes» merecen una definición más precisa y protectora

By | Actualidad, Actualidad., Ahorros, Ahorros., Banca, Portada

La CNMV calcula en alrededor de 55.000 millones de euros el patrimonio total en fondos de inversión denominados «verdes», o que cumplen alguno de los criterios ESG de sostenibilidad. Se trata, según los datos del regulador, de un 17,5% del patrimonio total de los fondos de inversión en España, en un porcentaje creciente, que muestra una demanda cada vez mayor de este tipo de herramientas de inversión y que, sin embargo, precisa de una definición y una regulación más precisas para un mayor desarrollo. La Jornada de Economía Circular y Consumidores que ADICAE celebra el 30 de noviembre en el Círculo de Bellas Artes de Madrid ha arrojado algo de luz sobre un sector todavía en construcción.

Así lo deja entrever Víctor Rodríguez Quejido, Director General de Política Estratégica y Asuntos Internacionales de la CNMV, y lo confirma la portavoz de la patronal Inverco, Elisa Ricón, que recoge el malestar de muchas de las gestoras ante la todavía imprecisión normativa sobre la definición, distribución y medición de estas herramientas de inversión. «Las entidades españolas están siendo muy prudentes al categorizar sus productos, avanzan despacio, ante una regulación exigente y difícil», expresa Ricón. Ahí podría explicarse la todavía desventaja cuantitativa que el mercado español mantiene aún ante el resto de Europa. Otro motivo: «todavía hay explicaciones que son demasiado complejas. Es difícil todavía medir y hacer seguimiento de la sostenibilidad en inversiones».

Así las cosas, a pesar de que la demanda de herramientas de inversión sostenible es creciente, el inversor todavía mide sus decisiones en función de parámetros tradicionales. De hecho, según los datos que avanzan tanto CNMV como Inverco, apenas un 14% de los inversores se atreverían con este tipo de fondos «verdes» aunque fueran menos rentables que el resto de carpetas de inversión. En realidad, apenas un 12% de los inversores españoles tienen en cartera este tipo de productos. Eso sí, en condiciones de igualdad de rentabilidad, dos de cada tres inversores incluirían en su cesta inversiones con parámetros de sostenibilidad. Según dice Elisa Ricón, en perfiles más jóvenes este porcentaje tenderá a crecer.

España, país de minoristas

Con todo, es factible que el futuro de la inversión sostenible en España tenga mucho que ver con un fenómeno propio del mercado de fondos en España, muy diferenciado del resto de Europa, y que tiene sus características. Según Inverco, en España hay alrededor de diez millones de partícipes en fondos de inversión, la mayor parte de ellos minoristas. Se trata de un perfil de pequeño ahorro tradicional que motiva una forma de gestión y comercialización de este tipo de activos diferente al resto de Europa. El marco europeo Mifid 2 establecerá un protocolo de comercialización de fondos verdes que incluirá preguntar expresamente si el inversor quiere que sus activos sean sostenibles. Habrá que ver cómo se aplica esto a un tipo de inversor atomizado y de bajo perfil de riesgo como el español.

Rodríguez Quejido, de la CNMV, afirma que la maquinaria legislativa europea ya se ha puesto en marcha. Pero admite la dificultad de una completa adaptación. El marco aún no está completo, van entrando en vigor normativas en diversas fechas, y todo ello implica nuevos conceptos, «una madeja» no exenta de dificultades. Al final, se trata de disponer de un marco de divulgación, un entorno de transparencia y criterios bien medibles y fácilmente comprobables para que las empresas aporten información «con la que los inversores tomen decisiones fundadas». No se parte de base idónea. Diversos estudios señalan que más de la mitad de los fondos que se autodenominan como verdes, realmente, no lo son. El «greenwashing», ese elefante en la habitación de la inversión sostenible. Tocará ver cómo evoluciona el mercado en España.

2.000 millones de euros en crédito al consumo a cuenta del Black Friday: ¿consumo sostenible?

By | Actualidad, Actualidad., Banca, Consumo, Créditos, Portada

ADICAE insta a los consumidores a no dejarse llevar por el consumismo manipulado al que incitan las campañas publicitarias del Black Friday, y a aprovechar las ofertas en base a sus necesidades reales. La campaña de 2020 implicó un aumento de 1.900 millones de euros en el saldo de créditos al consumo de los hogares españoles entre octubre y noviembre del año pasado, según las cifras del Banco de España. Las estadísticas del INE empiezan a reflejar subidas de precio en prendas de vestir y determinados artículos de informática, justo lo que más se demandará en estas fechas.

ADICAE advierte de que las campañas de promoción y oferta de crédito al consumo con motivo de los descuentos comerciales vinculados al Black Friday pueden generar riesgos y problemas para los consumidores en un contexto de incremento de precios, presupuestos familiares al límite por la subida de la luz y los carburantes, y productos poco transparentes y de riesgo como tarjetas revolving o créditos rápidos. En los últimos días, y a colación de la celebración del Black Friday, muchas entidades financieras han aprovechado para lanzar agresivas campañas de crédito y aplazamiento de pagos a sus clientes para favorecer el consumo en estas fechas. Banco Santander anunció 90.000 millones de euros en créditos preconcedidos y aplazamientos en las compras con su tarjeta de crédito All In One, mientras que otras entidades como ING y Bankinter han ofrecido descuentos en préstamos o en sus tarjetas.

Las campañas como el Black Friday, el Cibermonday, etc.…, no sólo se alargan cada vez más en el tiempo, sino que mantienen abusos existentes en las rebajas tradicionales (aumentar el precio de un producto unos días antes para después afirmar que ha sido objeto de una rebaja). Y, más allá de eso, incitan a un consumismo peligroso que lleva a adquirir productos no necesarios, de forma impulsiva y sin reflexión previa, y recurriendo además en ocasiones a financiación a través de créditos al consumo, créditos “rápidos” o tarjetas. El saldo de crédito al consumo en España está ya por encima de los 93.000 millones de euros, 6.000 más que a cierre de 2018, según el Banco de España. 2.000 de ellos coincidieron con el Black Friday de 2020.

Frente a estos intentos de manipulación de los consumidores a través de la publicidad y el marketing, muchas veces engañosos, ADICAE destaca varios factores que hacen necesario que los consumidores sopesen sus decisiones de compra antes de realizarlas: la incertidumbre económica y el propio interés de los consumidores, y también la actual situación del planeta y los retos de su sostenibilidad, elementos que precisamente la asociación analizará en una jornada nacional que celebrará este martes 30 de noviembre en el Círculo de Bellas Artes.

Por ello ADICAE apela a que los consumidores exploten las posibles oportunidades que en forma de rebajas se puedan presentar este Black Friday partiendo de la reflexión previa sobre si se necesita el producto o no, revisando la realidad del precio (que se diga que el producto está rebajado no es garantía de que haya una rebaja real) y sopesando la oportunidad de recurrir a crédito para la compra, habida cuenta de los abusos en el crédito en España. ADICAE recuerda que la tasa de interés de los créditos al consumo es un 54% mayor en España que en la zona euro si atendemos a los datos ponderados de 2021. En España el TAE para créditos a plazo entre 1 y 5 años se sitúa en el 7,16%, mientras que la media europea está en 4,65%.

Los consumidores cada vez pagan más y pueden ahorrar menos

By | Ahorros, Alimentación, Consumo, Portada

El coste de la vida es un 5,5% mas caro este octubre que el año pasado. Durante los últimos ocho meses los consumidores españoles han visto como se han ido incrementando los precios, hasta llegar a un aumento interanual que no se alcanzaba desde el año 92. Las causas, explica el propio Instituto Nacional de Estadística: la electricidad y los carburantes.

En el mes de octubre hemos alcanzado el precio histórico del megavatio hora en España, 288 euros el día 7, cuando hace un año estaba por debajo de 50€. El umbral de los 200 euros se ha sobrepasado de manera continuada en los últimos quince días y todo apunta a que seguirá así el próximo mes de noviembre.

En octubre el IPC escala al 5,5%, la electricidad marca récord con 288€/MWh y la gasolina alcanza su precio mas caro desde 2013

A pesar de los intentos del Gobierno por reducir el impacto de esta subida de los precios del mercado mayorista en las facturas de los consumidores, con suspensiones de impuestos como las del mes de septiembre y aportes presupuestarios como los de octubre, la realidad sigue siendo que los usuarios sufren cada día el encarecimiento de precios, ya no solo de manera directa con su consumo de luz, calefacción o gas, también fruto del aumento de los costes del sector industrial, que repercute los efectos del elevado precio de la energía.

Esta concatenación de cifras récord no solo se ve en la factura de la luz. Ocho semanas consecutivas lleva subiendo el precio de la gasolina hasta situarse en 1,49 euros, el nivel más alto desde 2013. El gasóleo se comporta de manera similar. Alcanza los 1,37 euros, el precio más alto desde hace nueve años. Esto supone que llenar un depósito medio de un coche de gasolina cuesta ya más de 80 euros y si es de gasoil 75, unos 20 euros más que hace un año.

A la hora de ir al supermercado también sufriremos el encarecimiento en más del 15% del precio de los alimentos en el ultimo año. Productos como los tomates o las manzanas son ahora un 15% más caros que en 2020, y mientras que la carne roja o el aceite de oliva suben en un porcentaje inferior, entre el 6 y el 4%.

La inflación puede acabar con una capacidad de ahorro de las familias ya mermada tras la pandemia

Si vamos sumando esos veinte euros extra al pasar por la gasolinera, el incremento de la factura eléctrica (de manera más o menos inmediata en función del tipo de mercado) y el aumento del precio de los productos básicos en la cesta de la compra, nos encontramos con que las familias cada vez dedican mayor porcentaje de sus ingresos a este tipo de gastos. ADICAE ya ha manifestado que la barrera de gasto en energía por parte de una familia media debe estar en torno al 5% de los ingresos, una situación que a día de hoy cada vez se cumple menos y que, además, va aparejada a un aumento en el gasto en otras partidas.

Esto hace que cada vez sea más difícil ahorrar a final de mes. La pandemia ya ha provocado que el 38% de los consumidores españoles haya reducido su capacidad de ahorro, un 53% si atendemos a aquellos con menores niveles de renta, según el Observatorio del Ahorro Familiar. En su informe destacan que, especialmente en los meses más duros de confinamiento, muchos pudieron mantener e incluso aumentar sus tasas ahorrativas, algo que se ha ido progresivamente reduciendo hasta llegar al segundo trimestre de 2021, cifrada en un 18% menos que el año anterior. La inflación y el aumento del gasto de las familias puede agravar aún más esta situación en los próximos meses, a pesar de la supuesta recuperación de la economía y la mejora de los datos de empleo.

Los descuentos del bono social alcanzarán el 60% del recibo eléctrico; urge su difusión entre los consumidores

By | Actualidad, Actualidad., Consumo, Noticias, Noticias recientes, Portada

El Consejo de Ministros ha aprobado este martes un nuevo paquete de medidas urgentes en materia de energía «para la protección de los consumidores vulnerables». Así, «el descuento en la factura de la luz otorgado por el bono social a los consumidores vulnerables crecerá del actual 25% al 60% -del 40% al 70% en el caso de los vulnerables severos- hasta el 31 de marzo de 2022, y se duplicará el presupuesto para el bono social térmico durante este 2021, alcanzando los 202,5 millones de euros», dice la nota de Moncloa. 1,2 millones de hogares disfrutan de este descuento. Los baremos económicos para su concesión darían acceso a más de 4 millones de familias.

Por eso es fundamental que las eléctricas no desincentiven las solicitudes, y dejen de poner trabas a su concesión. Y conviene que las autoridades, empezando por el propio Gobierno, sean más ambiciosos en su promoción y difusión. Por ejemplo, matizando esto: «El bono social contempla descuentos en la factura eléctrica regulada (PVPC) para los consumidores con rentas bajas o con circunstancias especiales, como recibir una pensión mínima, estar desempleado o incluido en un ERTE». En realidad, esas «rentas bajas» no lo son tanto. Aquellos hogares que tengan un menor a cargo podrán pedirlo si sus ingresos no superan los 15.800 euros anuales. Y con dos menores a cargo, hasta los 19.700 euros.

Esto es, millones de consumidores podrían acceder a estos descuentos en su factura eléctrica si la Administración y, sobre todo, las eléctricas cumpliesen su parte e incentivasen su tramitación. La clave está en atestiguar ese nivel económico, muchas veces un papeleo de difícil consecución, y que podría ser algo mucho más sencillo si eléctricas y administraciones públicas compartiesen datos con mayor rapidez y eficacia. Y si se mencionase que, obligatoriamente, para el bono social los consumidores deben permanecer en el llamado precio regulado (PVPC), la antigua tarifa de último recurso que ahora comercializan apenas un puñado de las centenares de empresas que operan en España.

Al final, la mitad de los beneficiarios del bono social han desistido de renovarlo en los últimos cinco años, y el número de perceptores es el menor en este periodo. Así las cosas, en este magma burocrático y ante las subidas de la electricidad, se fomentan agresivas políticas comerciales que tienen como objetivo trasladar a los usuarios al mercado libre, hurtándoles su derecho a solicitar el bono social. El boletín de la CNMC cifra en 10,5 millones los consumidores en precio regulado (PVPC), frente a los más de doce millones que tenían esta tarifa hace cinco años. Los últimos datos, además, son de mayo de este año, a la espera del impacto que pueda tener el cambio del cálculo de tarificación del mes de junio.

Un impacto que, previsiblemente, será importante. Las intensas campañas de comercialización telefónica y online, que directamente aluden a la angustia por la falta de control del precio de la materia prima eléctrica, se han trasladado ya al ámbito mediático. Empresas como Endesa y Naturgy están lanzando campañas de comunicación anunciando tarifas planas con precio estable con el objetivo de trasladar directamente a la opinión pública su estrategia de «estabilización de precios». Autoridades y reguladores siguen recordando que las tarifas planas de las eléctricas siguen siendo más caras que los recibos de un hogar medio en precio regulado.

Abrir chat
1
💬 Consulta tus dudas de consumo
Escanea el código
Hola👋
Si tienes cualquier consulta o duda sobre consumo puedes hacerla por aquí